¿Cuáles son los mejores bloqueadores de carbohidratos, grasas y azúcares?

Seguro que habéis oído hablar de este concepto y rápidamente os ha venido a la cabeza una imagen vuestra dando rienda suelta a aquello que a muchos nos gustaría: comer lo que quisiéramos sin riesgo a engordar, especialmente carbohidratos. Nada más lejos de la realidad.

Como ya sabéis, no hay fórmulas mágicas: ni en alimentación, ni en entrenamiento, ni en nada en la vida. Solo constancia, esfuerzo, equilibrio, ejercicio, trabajo, buena predisposición y un estilo de vida activo. Aun así, nos adentraremos en el mundo de los bloqueadores para que sepáis qué son, qué implica, cómo podrían ayudar o no, y cuál es su principal cometido.

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¿Qué es un bloqueador?

Sirve para referirse a aquellos suplementos que, en teoría, reducen la cantidad de calorías que el cuerpo absorbe con respecto a los alimentos que se consumen. Básicamente, se trata de interferir en la absorción de nutrientes específicos, sobre todo los carbohidratos, grasas o azúcares.

De esta manera, el cuerpo supuestamente podría darse ciertas alegrías en forma de alimentos calóricos sin tener luego una traducción inmediata en el aumento de peso. Sin embargo, la efectividad y seguridad de este tipo de suplementos puede ser cuestionable, y depende de muchas variables. Existen principalmente bloqueadores de carbohidratos y de grasas.

¿Cómo funciona un bloqueador de carbohidratos?

Actúa directamente inhibiendo la acción de una enzima del intestino delgado, que es la responsable de descomponer los carbohidratos en azúcares simples para que el cuerpo los pueda absorber correctamente y convertirlos en energía.

De esta manera, y ejerciendo un rol inhibidor de esta enzima, se evita la total absorción de los carbohidratos ingeridos. Esta acción de bloqueo hace que los carbohidratos no digeridos puedan pasar directamente al tracto digestivo para ser expulsados a través de las heces.

Esto desde luego no implica que, mientras se tome el suplemento, uno se pueda dar atracones sin consecuencias. No funciona así. La ingesta de un producto así solo tendría sentido bajo la supervisión de un profesional de la salud y enmarcada en un plan guiado de pérdida de peso, siguiendo una dieta equilibrada y atendiendo a la versatilidad de nuestros platos.

En caso de considerarse válida la opción de los bloqueadores, hay que contemplar un suplemento así desde el punto de vista de representar una ayuda más o menos puntual y no desde la perspectiva de ser un compensador de festines. Y siempre con la regulación y orientación por parte de un profesional de la salud y la nutrición.

¿Qué implicaciones tiene?

Se trata de una fórmula que lleva décadas en el mercado y está compuesta a base de extracto de alubia blanca. Aquí van una serie de posibles efectos secundarios:

• Flatulencias e hinchazón abdominal.
• Problemas gástricos en caso de no respetar las cantidades recomendadas o sostener demasiado el suplemento en el tiempo.
• Solo promovería la pérdida de grasa corporal en caso de enmarcarse dentro de una rica equilibrada y variada.
• Riesgo de pasarse en el consumo de carbohidratos teniendo la falsa creencia de una red de seguridad en forma de bloqueador.

Está bastante desaconsejado para personas con problemas digestivos.

Es importante tener en cuenta que estos suplementos a menudo no ofrecen resultados demasiado significativos y pueden venir aparejados de efectos secundarios, por eso es necesario que haya una supervisión.

Tal vez es más recomendable centrarse en mantener una dieta donde exista un buen equilibrio entre carbohidratos, proteínas, verduras y frutas, aderezada con algo de ejercicio, una correcta hidratación y buen descanso.

Es decir, particularidades propias de un estilo de vida activo. Suele ser una de las mejores fórmulas para lograr una pérdida sostenible de peso. Y en caso de decidirse por algún suplemento en forma de bloqueador con extracto de alubia blanca, lo mejor es ponerse en manos de profesionales para ajustar su posología y también el menú equilibrado con el que intentaremos alcanzar el objetivo de perder peso.

No se puede perder esto de vista: acometer un logro así implica cambios estructurales en nuestra dieta, no solo la ayuda puntual de un bloqueador de carbohidratos.