Súper Inmune en Otoño
El tiempo se vuelve loco, pasamos de días calurosos a días helados muy rápidamente, esto induce a que nuestro sistema inmunológico se vea alterado ante unas constantes agresiones que lo debilitan y es por eso mismo por lo que enfermamos con más facilidad.
Sistema inmunológico hace referencia a la capacidad que poseen los seres vivos de no sufrir continuamente las enfermedades que ocasionan la agresión de los microorganismos. Por ello es de suma importancia que lo cuidemos para estar reforzados y así seamos menos propicios a enfermar.
La alimentación es uno de los factores más importantes para el sistema inmunológico. Si no es correcta o es insuficiente se producirá una caída de las defensas; si es equilibrada, las mantiene en forma o incluso las fortalece. En este punto cabe destacar que existen unos nutrientes directamente relacionados con el sistema inmunológico, como son ciertas vitaminas y oligoelementos:
- Vitamina C: ¿A quién no le han recomendado un zumo de cítricos para evitar resfriarse? Pues bien, la vitamina C reduce la duración de las gripes y resfriados. La encontramos en frutas, verduras y hortalizas; como la col, el pimiento, cítricos, melón, tomate y las fresas.
- Vitamina A: contribuye a mantener las barreras naturales contra las infecciones y a generar glóbulos blancos. La encontramos en semillas como la de calabaza, en la zanahoria, en los huevos y en algunas frutas como el albaricoque y melocotón.
- Vitamina E: además de ser muy beneficiosa para nuestra piel, la vitamina E aumenta la respuesta inmunológica. Como andaluz y defensor de nuestra dieta mediterránea la mejor recomendación es que toméis aceite de oliva virgen extra. Además la encontrareis presente en otros aceites, cereales y frutos secos.
- Vitaminas del grupo B: Contribuye a la creación de linfocitos(glóbulos blancos). Está presente principalmente en carnes, huevos, cereales y legumbres.
- Oligoelementos(Hierro, Zinc y Selenio): Estos minerales refuerzan nuestro sistema inmune. Los podemos encontrar en carnes rojas, pescado, huevos y mariscos.
Y ahora a entrenar que ya no hay nada que se ponga entre tú y tus objetivos!
Escrito por: Miguel Ángel Angulo