Lesiones deportivas: qué son y cómo prevenirlas

¿Quién no ha sufrido una lesión deportiva en algún momento de su trayectoria? Son inherentes al ejercicio y más si le metemos caña al cuerpo o nos preparamos para ciertas modalidades deportivas. Ya ni hablamos si practicamos una actividad de competición, donde es habitual entrenar con molestias, o ajustamos plazos de recuperación para estar disponibles cuanto antes. Que este artículo sirva como guía para conocer un poco más acerca de estos contratiempos, las diferentes tipologías, cuál es el deporte con menos lesiones o por qué se producen las lesiones deportivas.

¿Qué es una lesión deportiva?

Son daños que ocurren en el cuerpo durante la práctica de actividades físicas o deportes. Se pueden clasificar en varios tipos de lesiones deportivas según el área afectada o la naturaleza del daño.

Lesiones según el tejido afectado

Las lesiones deportivas pueden clasificarse según el tipo de tejido dañado; cada uno responde de manera diferente a los impactos y esfuerzos físicos. A continuación, os detallamos las lesiones más comunes en cada tejido afectado.

Lesiones musculares

• Distensión muscular: estiramiento excesivo de las fibras musculares.
• Desgarro muscular: ruptura parcial o total de las fibras.
• Contractura muscular: tensión sostenida del músculo que provoca dolor y rigidez.
• Contusión muscular: golpe directo al músculo que causa hematoma y dolor.

Lesiones articulares

• Esguince: estiramiento o desgarro de los ligamentos que sostienen una articulación.
• Luxación: desplazamiento de un hueso fuera de su posición normal en la articulación.
• Subluxación: desplazamiento parcial de un hueso en una articulación. En ciertas situaciones, el hueso puede volver a su posición normal por sí mismo, ya sea debido a la elasticidad de los tejidos circundantes o al movimiento del cuerpo. Sin embargo, incluso si una subluxación se corrige espontáneamente, puede dejar la articulación inestable y propensa a futuras lesiones

Lesiones óseas

• Fractura: ruptura de un hueso, que puede ser completa o incompleta.
• Fisura: grieta o fractura parcial en un hueso, sin separación completa de las partes.
• Fractura por estrés repetitivo: pequeñas fisuras en el hueso. Esto es, tensión o carga que se aplica repetidamente a una parte del cuerpo, generalmente en músculos, tendones, articulaciones o huesos, a lo largo del tiempo. Estas lesiones ocurren cuando se realizan movimientos idénticos o muy similares de manera frecuente, sin permitir suficiente tiempo de descanso o recuperación.

Lesiones tendinosas

• Tendinitis: inflamación de un tendón, generalmente por uso excesivo.
• Tendinosis: degeneración del tendón, típicamente debido a daño crónico.
• Rotura de tendón: desgarro parcial o total de un tendón.

Lesiones ligamentosas

• Esguince: daño en los ligamentos, común en tobillos, rodillas, y muñecas.
• Rotura de ligamento: desgarro completo de un ligamento, como en el caso del ligamento cruzado anterior (LCA), el posterior (PCL), los de la articulación del tobillo o el ulnar colateral del colo (UCL)

Estos son los principales tipos de lesiones deportivas.

Lesiones según la gravedad

Las lesiones deportivas varían en severidad, desde daños leves que permiten una rápida recuperación hasta lesiones graves que pueden requerir cirugía y largos periodos de rehabilitación. A continuación, se clasifican las lesiones según su gravedad para una mejor comprensión de su impacto.

Lesiones leves

• Contusiones: golpes que no afectan gravemente la función del área afectada.
• Esguinces leves: daño menor a los ligamentos con una ligera inestabilidad articular.
• Tendinitis: inflamación del tendón que puede curarse con reposo y fisioterapia.

Lesiones moderadas

• Desgarros musculares moderados: ruptura parcial de fibras musculares que causa dolor significativo.
• Fracturas no desplazadas: ruptura ósea sin desplazamiento de las partes del hueso. Las fracturas no desplazadas suelen ser más fáciles de tratar, ya que el hueso no ha perdido su alineación natural y puede sanar con inmovilización adecuada, como un yeso o férula.
• Esguinces moderados: daño significativo a los ligamentos con inestabilidad articular moderada.

Lesiones graves

• Roturas completas de ligamentos o tendones: necesitan tratamiento quirúrgico.
• Fracturas desplazadas o compuestas: los fragmentos óseos están fuera de alineación o atraviesan la piel.
• Luxaciones: desplazamiento completo de una articulación, con daño potencial a ligamentos y nervios.

Lesiones según la causa

Las lesiones deportivas pueden originarse por causas traumáticas, como impactos directos o caídas, o por el uso repetitivo de una parte del cuerpo, que conduce a daños acumulativos. A continuación, se clasifican según su causa para entender mejor su origen.

Lesiones traumáticas

• Golpes directos: contusiones o fracturas causadas por un impacto directo.
• Caídas: fracturas o esguinces debido a caídas accidentales.
• Colisiones: lesiones articulares, óseas o musculares causadas por contacto con otros jugadores en deportes de equipo, por ejemplo

Lesiones por sobreuso

• Tendinitis: inflamación por uso repetitivo.
• Fracturas por estrés: microfisuras en los huesos debido a impactos repetitivos
• Síndrome de sobreentrenamiento: cansancio extremo y dolor muscular crónico debido a la falta de descanso.

Esta clasificación abarca una amplia gama de lesiones deportivas, proporcionando un marco más detallado para entender los diferentes tipos de lesiones que pueden ocurrir durante la práctica deportiva.

¿Cuáles son los deportes más propensos a lesiones?

Aquí os presentamos algunos de los deportes más permeables a la aparición de golpes y traumatismos.

1. Fútbol Americano. Es un deporte de contacto intenso con frecuentes colisiones, lo que lleva a un alto riesgo de conmociones cerebrales, lesiones de rodilla (como rotura de LCA), y lesiones en el hombro.
2. Rugby. Similar al fútbol americano
3. Fútbol. Las lesiones comunes incluyen esguinces de tobillo, desgarros musculares, y lesiones de rodilla debido a los cambios rápidos de dirección, los saltos y el contacto físico continuo. 
4. Baloncesto. Frecuentes esguinces de tobillo, lesiones de rodilla y dedos, y contusiones debido al salto, los cambios de dirección rápidos y el contacto físico.
5. Esquí y snowboard. Alta incidencia de fracturas, lesiones de rodilla, y contusiones por caídas o colisiones.
6. Ciclismo. Las caídas pueden causar fracturas, contusiones y lesiones en la cabeza, además del riesgo de lesiones por sobreuso como tendinitis.
7. Gimnasia. Lesiones por sobreuso, fracturas, dislocaciones y desgarros musculares son comunes debido a los movimientos intensos y de alta precisión.

¿Cuáles son los deportes y actividades menos propensos a lesiones?

Aquí os presentamos algunos de los deportes menos permeables a la aparición de golpes, desgarros y traumatismos.

1. Natación. Menor impacto en las articulaciones. Las lesiones más comunes son por sobreuso, como la tendinitis en los hombros. Es uno de los candidatos a cuál es el deporte con menos lesiones, sin abordarla lógicamente en clave competición
2. Golf. Aunque las lesiones por sobreuso en la espalda y el codo son posibles, el riesgo de lesiones traumáticas es bajo.
3. Caminar. Actividad de bajo impacto con un bajo riesgo de lesiones, salvo esguinces leves o ampollas en los pies.
4. Yoga. Aunque pueden ocurrir lesiones si las posturas se realizan incorrectamente, el riesgo general es bajo, centrado principalmente en distensiones musculares menores.
5. Ciclismo de ocio. Si se practica en condiciones seguras y sin buscar alta velocidad, el riesgo de lesiones es bajo. Las lesiones suelen ser esporádicas y de baja gravedad.

Factores y elementos que influyen en la prevención de lesiones

Para poder prevenir una lesión, hay que tener presentes varios aspectos tales como qué tipo de actividad posterior vamos a realizar, qué duración va a tener o qué intensidad le daremos, entre otras.

Todo ejercicio físico, tanto si está basado en el rendimiento físico o en la recreación corporal, es susceptible de provocar una lesión deportiva. Los factores que influyen en la prevención van a contribuir a mejorar tanto la calidad de vida de forma general como una mejora de las sensaciones en la práctica deportiva. ¿Cómo prevenir lesiones en el deporte? Aquí van algunos factores:

• Poseer una preparación física de base y adecuada al ejercicio que se va a desarrollar
• Realizar un calentamiento óptimo y unos estiramientos correctos
• Utilizar un equipamiento adecuado (calzado, ropa, protectores, etc)
• Controlar la salud con frecuentes análisis y controles médicos
• Tener un estilo de vida saludable (alimentación equilibrada, evitar sustancias nocivas, descansar, etc)
• Cesar la actividad física ante cualquier síntoma de dolor o mala sensación

Entre todos los factores anteriormente citados, uno de los más influyentes es la condición física del sujeto. Está demostrado que personas con un bajo nivel tienen más probabilidades de padecer alguna lesión.

Es importante que cada deportista analice la actividad o deporte que va a realizar, teniendo en cuenta el nivel de intensidad y volumen solicitado para poder planificar adecuadamente la actividad, reduciendo el riesgo de lesiones.

Suplementos para el proceso de recuperación

En caso de una lesión deportiva, la elección de suplementos puede incidir positivamente en este proceso. Te dejamos algunos ejemplos interesantes:

• EAA Zero. Los aminoácidos esenciales son cruciales para la reparación muscular y la síntesis de proteínas. Suplementar con aminoácidos esenciales puede ayudar a mantener la masa muscular durante la recuperación y contribuir a la reparación de tejidos. En esta línea, también es útil una proteína de suero fácil de digerir como el 100% Pure Whey. 
• Liquid Curcuma. Posee propiedades antiinflamatorias que pueden ser útiles durante la fase de inflamación post-lesión.
• Ca D3 K2 (Calcio, Vitamina D y Vitamina K2). Apoya la salud ósea, la función muscular y la coagulación de la sangre. Estos nutrientes pueden ser útiles para la recuperación ósea y muscular.
• Vitamin C1000. Es importante para la formación de colágeno, lo cual es esencial para la reparación de tejidos. Además, actúa como un antioxidante que puede ayudar en la regeneración celular.
• Melatonina. Una ayuda para una buena calidad de sueño facilita la reparación de tejidos y la regeneración general.

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Miguel Ángel Angulo
Bicampeón de España – Men’s Physique