Mitos sobre las dietas
Cada vez más personas deciden cambiar de hábitos y comenzar a cuidarse para mejorar su calidad de vida y sobre todo para gozar de buena salud, y el primer paso para llevar un estilo de vida saludable es cuidar la alimentación y hacer dieta. Pero la verdad es que hay que ser precavidos con este tema ya que es un tema muy ambiguo en el que existe una gran diversidad de opiniones, unas más acertadas y otras no tanto por desgracia.
Justo ahora que acabamos de empezar el año me parece el momento más oportuno para hablaros de este tema, ya que uno de los propósitos de año nuevo más comunes es hacer dieta y en general empezar a cuidarse.
Por eso vamos a ver algunos de los mitos sobre las dietas más comunes y también los vamos a desmentir para despejar las posibles dudas que aún os puedan surgir.
Mitos sobre las dietas
1) Comer rápido engorda
Lo que ocurre cuando comemos más rápido de lo recomendable es que no le estamos dando el tiempo suficiente al hipotálamo para que detecte el azúcar de los alimentos que estamos ingiriendo, y por lo tanto cuando este mande la señal al cerebro de que ya estamos saciados, seguramente habremos comido más de lo que necesitábamos.
Por lo tanto, técnicamente comer rápido no engorda. Simplemente hay que controlar las cantidades y servir en el plato únicamente lo que nos toque comer.
2) Saltarse la cena adelgaza
Mucha gente cree que no cenar adelgaza, pero lo cierto es que ocurre todo lo contrario. Cuando te saltas una comida, estás dejando mucho más tiempo del aconsejable entre una comida y otra, por lo tanto llegarás con mucha más hambre de lo habitual y comerás más de lo que te toca.
Lo aconsejable es hacer como mínimo 5 comidas al día cada 3,5 o 4 horas entre ellas.
3) El pan engorda
Igual que con el resto de alimentos, si lo comemos con moderación no engorda. Simplemente hay que controlar las cantidades y los momentos en los que lo consumimos, siempre hasta el medio día.
4) Beber durante las comidas engorda
Aunque pueda parecer extraño, hay personas que creen que beber agua durante las comidas engorda. Lo cierto es que el agua no contiene calorías y lo único que puede ocurrir si bebemos agua durante las comidas es que nos quite el apetito y comamos menos.
Por lo tanto, beber agua durante las comidas no engorda. De hecho beber un vaso de agua unos minutos antes de las comidas reduce el apetito, y esto puede beneficiar a personas que quieren perder peso de forma saludable.
5) La lechuga retiene líquidos
La lechuga es una hortaliza altamente diurética que ayuda a eliminar líquidos debido a su alto nivel de agua y potasio. Esto desmiente el mito de que la lechuga retiene líquidos.
6) Comer fruta de postre engorda
Da igual si te comes la fruta antes o después de las comidas. Realmente las personas con apetito descontrolado que quieren perder peso suelen comer una fruta antes de las comidas para reducir el apetito, pero eso no quiere decir que si la comes después vaya a engordar más.
Simplemente tienes que elegir la fruta adecuada para cada momento del día.
7) El plátano engorda
Como ya he dicho más arriba, depende del momento del día y de la cantidad. Obviamente si te comes 3 o 4 plátanos antes de irte a dormir, te engordarán más que si te comes uno a media mañana o antes de tu entrenamiento.
De hecho el plátano es una fruta muy buena y completa en cuanto a nutrientes que nos aporta muchos beneficios, sobre todo a los deportistas.
8) El aceite de oliva engorda
Al igual que con el pan y el plátano, depende de la cantidad que tomemos. Si es cierto que el aceite de oliva es muy calórico, igual que el resto de aceites. Aporta unas 9 kcal por cada gramo, por lo tanto hay que controlar su consumo más que con otros alimentos ya que es muy fácil pasarse de la dosis adecuada de aceite.
Se recomienda tomar una o dos cucharadas soperas repartidas en las comidas del día.
9) Los hidratos de carbono engordan
Aunque suene repetitivo los hidratos de carbono no engordan, simplemente hay que controlar las cantidades. Los hidratos de carbono son la fuente principal de energía de nuestro cuerpo y por lo tanto no debemos eliminarlos de nuestra dieta, simplemente hay que ajustar las cantidades a nuestros objetivos y necesidades.
Conclusión
Estos son algunos de los mitos sobre las dietas más comunes que nos podemos encontrar cuando vamos a empezar una dieta y por eso he querido desmentirlos, así que ya puedes seguir adelante cumpliendo tus propósitos de año nuevo.